EL ARTE Y EL ARTISTA
El arte es el acto por el cual, valiéndose de la imagen, el sonido, la palabra o el movimiento, el hombre imita o expresa lo material o inmaterial y crea o inventa una nueva escena.
«Toda obra de arte responde siempre a un momento histórico»
Así por ejemplo “El Guernica” de Picasso, es una obra de carácter dramático en la que la ausencia de color no es casual, sino intencional porque refleja la destrucción del hombre por el hombre. A través de la obra el autor da testimonio de la destrucción del pueblo Guernica. El arte es siempre fruto del encuentro del artista con alguna vertiente de la realidad.
El artista plástico se expresa a través de la línea, la forma o el color. Es él quien transmite sentimientos, emociones tales como alegría, tristeza, soledad, angustia, placer, miedo, etc. Asimismo se vale de su trabajo para hacer trascender sus profundas reflexiones.
En los últimos tiempos, veo infinidad de tendencias y experiencias en los museos y salas de arte. La tecnología ha abierto nuevos espacios. El arte digital, la fotografía, el arte objeto, las instalaciones, muestran nuevas concepciones sobre lo que se considera arte.
«Creo que toda experiencia es válida si está sustentada y sostenida sobre una formación sólida que permita mantenerse en el tiempo»
LA VALORACIÓN DE LA OBRA DE ARTE
Si la belleza es subjetiva, la consideración del arte también debería serlo, por lo que no podría existir una visión objetiva del arte. No es cierto que toda obra de arte pretenda ser bella, tal el caso del Guernica. En todo caso toda obra debería ser significativa porque existen elementos que van más allá de la concepción estética, para definir el arte.
La valoración estética debería realizarse al margen de la época en que fue concebida, de su dificultad, de su autor o precio del mercado. El valor estético de una obra debería establecerse simplemente, a partir de las impresiones y emociones que la obra de arte es capaz de provocar en el espectador, hecho totalmente subjetivo y personal.
EL ESPECTADOR
La tarea del espectador es fruto del encuentro entre él y la obra. La obra de arte es un campo de juego en el cual diversos elementos expresivos entreveran sus posibilidades y dan lugar a un ámbito de mayor envergadura. La tarea del contemplador es entrar en el juego, crear con la obra una experiencia reversible en la cual ambos se enriquecen.
Si hemos de vivir el juego creador al cual nos invita toda obra de arte, debemos afinar la sensibilidad para poder percibir el poder expresivo de cada material según su textura, colores y luces. Los colores tienen una belleza que le es propia y que es preciso conservar del mismo modo que en la música se conservan los tonos. El color no existe sino por el contraste con otros colores.
Considero que la obra de arte debe interpelar al observador, establecer un diálogo no verbal. El artista cuenta una historia de sensaciones y percepciones, es un comunicador.
«El observador tiene que ser un receptor sensible capaz de establecer un diálogo silencioso entre él y la obra»
LAS CRÍTICAS DEL ARTE
La labor del crítico de arte, es algunas veces cuestionada desde distintos lugares. En realidad ese trabajo que en ciertas ocasiones no es aceptado, es sumamente complejo e implica gran sentido de responsabilidad.
Todos podemos tener una actitud crítica, un juicio valorativo, es decir, tenemos la posibilidad de llegar a ser críticos de nuestras propias obras y de la de los demás, pero es imprescindible la mirada objetiva, argumentativa y especializada del crítico de arte. A partir de su óptica podemos detenernos, reflexionar y perfeccionar nuestro trabajo. Cada error sirve para iniciar una etapa de superación.
«La crítica obliga a repensar el trabajo, a cuestionarse y a trabajar en forma sostenida y sistemática»
En nuestra ciudad El Dr. Jorge Taverna Irigoyen, Miembro de la Academia Nacional de Bellas Artes y Miembro de las Asociaciones Argentinas e internacionales de críticos de Arte de París, es un destacado profesional de la cultura a quien valoro y ha sido uno de los críticos de mi obra.
El profesor Domingo Sahada, crítico del diario “El Litoral” realiza un trabajo responsable, con su postura siempre argumentada. En diferentes ocasiones también criticó mis producciones.
A ambos debo mi gratitud ya que me han dado la oportunidad de crecer como artista plástica.
MIS ARTISTAS PREFERIDOS
Admiro a Álvaro Gatti, pintor santafesino, por el modo en que trabaja la acuarela, y otros materiales. Las líneas están presentes en toda su obra, éstas se entrecruzan y formulan una trama casi geométrica.
Admiro también a Carlos Gómez Centurión, pintor Sanjuanino. Es un pintor viajero como los del siglo XIX. Emprende expediciones y coloca el atril frente a glaciares, salares, etc. acompañado por poetas, sonidistas, cineastas, etc. Ha pintado el Cerro Mercedario, la Puna, entre otros lugares. Todos son experiencias en la cordillera. Su género es el paisajismo que tiene algo de figurativo y algo de abstracto.